Hoy toca hablar sobre el segundo tema introductorio aquí (todavía faltarán los Arcanos menores, pero eso lo haré en su respectivo momento), y se trata sobre la segunda mitad que compete este Blog: las bellas y nobles Flores de Bach.
Este tema en particular, cada vez que lo toco me hace imaginar siempre la parte más linda y noble que habita en la naturaleza, como si estuviera haciendo un viaje a través de ésta. Y es que cada vez que pronuncio las palabras Flores de Bach, se viene a mi mente todo el ímpetu de mi asombro, al no poder entender cómo la naturaleza en su fuerza tan perfecta y creadora, no sólo es capaz de crear a la vida misma que habita aquí; sino además, a los elementos naturales capaces de sanarnos de cualquier padecimiento (ya lo sabían los antiguos chamanes), y también para fomentar nuestro propio bienestar.
¿Habría sido posible --me pregunto yo-- que Edward Bach se haya conectado con esta naturaleza para escoger respetuosamente sus treinta y ocho remedios? No lo sé. Pero lo cierto es que este gran genio del que se tiene conocimiento --médico y homeópara inglés--, algo hizo para que su cabecilla hiciera un "clic mágico" y se volteara desde esa imagen cuadrada y científica de la mayoría de los Médicos, para adentrarse un pasito más al frente y permitir también la otra realidad negada, la de la esencia, la de la energía y de la "vibra" (algo similar me pasó a mí también por ser Médico, pero digamos que eso es parte de otra historia...) Por tanto debo decir que este genio, tan querido y respetado por mí, tuvo una época de crisis-desperar en su juventud como estudiante de medicina, y se dio cuenta que la enfermedad por sí sola no existía, sino que atribuyó a las emociones humanas como grandes creadoras (o adyuvantes) para el desarrollo de todas las enfermedades. Una vez que pulió estos conceptos tan suyos, fue cuando entonces se dedicó a buscar la manera de equilibrar la mente y las emociones para así evitar la enfermedad, y su mejor idea y el motivo que me hace admirarlo tanto, fue escoger precisamente a nuestra madre naturaleza como su enfermerita y ayudante personal en tan rigurosa pero noble labor, escogiendo poco a poco los remedio de varias flores silvestres y nativas de su región, hasta dar así, con los treinta y ocho remedios florales que hoy en día se conocen y forman parte de los métodos curativos del hombre.
A continuación les muestro la flor Agrimony, la primera de la lista del alfabeto floral:
Pero, ¿de qué manera actúan las flores? Y sí, esta es la parte donde vienen los escépticos y los científicos y toda la horda de incrédulos a criticarme que por qué creo en tal cosa, de que el efecto placebo, de que no es posible y bla bla... bla... Pero lo cierto es que aquí más que un juego de "dosis" que traspase las paredes digestivas y llegue al hígado y se distribuya por el cuerpo, etc. etc. (lo que hace comúnmente un medicamento cualquiera de farmacia), aquí hablamos de un tema mucho más sutil, efímero, etéreo, y tiene que ver con la vibración y la energía de la flor. Para quien sepa un poco de homeopatía, se dará cuenta de lo riguroso que debe ser el preparar un compuesto homeopático, porque de lo contrario, puede carecer de efecto o incluso ser contraproducente. En este caso es algo similar, aunque aquí lo importante no es la cantidad "de flor" que le metemos a una persona como dosis, sino la energía, la vibración que esa flor tiene y que es capaz de neutralizar, paulatina y natural, un comportamiento, un proceso mental o una emoción de un ser vivo, de manera tal que le permita mejorar una crisis que esté pasando (más fácil), para llegar a corregir patrones de comportamiento y personalidad (más difícil). Porque como bien saben nuestros amigos psicólogos, cambiar patrones de personalidad no es tan fácil, y ya decía nuestro querido Confucio, "el que inventó la confusión" como dijo una sabia candidata a "Miss de misses Universos" (que más bien debería sonar missed): "más fácil es variar el curso de un río, que modificar el carácter de un hombre". Y así es.
Ahora les muestro la flor Willow, que está dedicada para todos los que son rabiositos y rencorosos.
Y por último hablando de su preparación y su dosis, ¿cuál es lo indicado? Las flores de Bach por defecto, vienen casi siempre preparadas en una dilución de 1:144 (flor/brandy), o sea que la cantidad de flor es mínima en comparación al Brandy que es en donde vienen diluidas. Esta dilución de base es el "frasco madre". Ya después de ese frasquito sacaremos de 4 a 6 gotas para adultos y de 2 a 4 para niños, para echarlas en otro frasco nuevo, donde añadiremos una cucharilla de brandy (excepto niños y personas con problemas de drogas/alcohol, claro está), y el resto lo rellenamos con agua mineral. Y ¡LISTOOO! Ya tendremos nuestras primeras flores preparadas. Cuáles añadiremos dependerá de lo que queramos corregir en nosotros o en los demás (ya abordaré este tema cuando hablemos de cada flor). Luego de tener el frasco preparado, la persona puede tomarlas varias veces al día, dependiendo del motivo, pueden ser 7 gotitas cuatro veces al día (c/6hrs) o 10 gotitas tres veces al día (c/8hrs.) Claro está que todo dependerá de la situación.
Finalmente qué decir, que estas florecitas son el perfecto aliado para ayudarnos a calmar nuestras emociones muchas veces negativas, que pueden ayudar a mejorar el carácter de una persona (aunque sea un poco más difícil), y por tanto, nos pueden ayudar en un sinnúmero de afecciones emocionales y psicológicas (no por nada los amigos psicólogos la usan mucho en sus consultas); ayudando a superar fobias, depresiones, crisis de ansiedad, apegos emocionales excesivos, angustia, apatía, traumas, hiperactividad, etc. etc. etc. Y por tanto, nos ayudarán INDIRECTAMENTE en afecciones más físicas. Por ejemplo, alguien con mucho dolor en el pecho puede que no sea simplemente sinónimo de infarto, sino de mucha opresión y angustia guardada; démosle unas cuantas florecitas para que lo ayudemos a liberar esas emociones y así que se cure su dolor en el pecho. De todas maneras, y como dije al inicio de mi blog, es muy útil usar estas maravillosas flores en compañía del amigo Tarot, porque así veremos que mientras el Tarot nos dice qué anda flojeando o flaquando por ahí, las florecitas nos ayudarán a fortalecerlo. Pensemos en ellas aaaantes de cualquier ritual y esas cosas, que no estoy en contra de ellos, pero es mejor usar métodos armónicos que nos ayuden a fortalecer y a equilibrar a la persona, antes de intentar cambiar sus circunstancias para hacerla caprichosamente feliz.
Y para finalizar les dejo el juego de mis treinta y ocho florecitas de Bach en imágenes. Se usan como test diagnóstico en casos de que una persona no quiera hablar sobre lo que le pasa y tampoco quiera usar el Tarot como método investigativo o de diagnóstico. Aquí va:
NOTA IMPORTANTE: Las florecitas no sólo pueden usarse en personas, también son muy útiles para animales o plantas. En el caso de los animales se puede poner unas cuatro gotitas en su platito donde beben agua comúnmente, o en caso de crisis (Rescue Remedy), aplicarles directamente a la boca. Para las plantas puedes ser 2 ó 3 gotitas diluidas en el agua de riego, o aplicar directamente una gota en la raíz. Más adelante abordaré en profundidad el tema de las dosis tanto para las flores en general, como para el Remedio de Rescate (Rescue Remedy); y tanto para plantas, animales y personas.
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